Baloncesto

9 formas de mejorar tu juego de baloncesto

Todo el mundo quiere ser el mejor jugador en la cancha. Es humano querer ser mejor que tus oponentes y ayudar a tu equipo a ganar. Sin embargo, no puedes simplemente querer encestar y dominar la defensa. 

Tienes que practicar, entrenar y tener la mentalidad adecuada para lograr tus objetivos. A continuación, nueve cosas que puedes hacer para mejorar como jugador de baloncesto.

  1. La práctica hace la perfección

No hay magia para mejorar: se necesita tiempo y repeticiones. La “regla de las 10.000 horas”, que hizo famosa Malcolm Gladwell en su libro Outliers: El secreto del éxito, afirma que se necesitan al menos 10.000 horas de práctica para dominar una habilidad. 

La genética y la complejidad pueden acelerar o perjudicar el proceso. Por ejemplo, no todo el mundo puede hacer un mate, pero saltar a la cuerda no requiere 10.000 horas para dominarlo.

  1. Repeticiones de calidad

La calidad de tu trabajo es más importante que la cantidad. Esto no significa que debas dedicar menos tiempo; significa que te beneficiarás más de unas pocas repeticiones de alta calidad que de un montón de repeticiones descuidadas. 

Alta calidad significa que ejecutas a la velocidad del juego, te centras en la técnica y mantienes un alto nivel de energía, en lugar de pasar por el aro o apresurarte a terminar. 

Por ejemplo, realiza un ejercicio de tiro en lugar de tirar por ahí. Las repeticiones de baja calidad pueden perjudicar tu juego al reforzar la mala forma. Son simplemente una pérdida de tiempo.

  1. Centrarse en los pequeños detalles

Muchos jugadores parecen despreocuparse de las pequeñas cosas -como la forma y el juego de pies-, pero pueden suponer una gran diferencia en su juego. 

Tienes que asegurarte de que tienes una base sólida, o de lo contrario las pequeñas cosas te perjudicarán en el futuro. Alan Stein, propietario de Stronger Team, dice: “El trabajo que pones es un ladrillo, y construyes tu edificio ladrillo a ladrillo”.

  1. Disciplina

Sé siempre disciplinado. Esfuérzate al 100% durante los ejercicios y la práctica de habilidades. No aflojes cuando estés cansado, y nunca faltes a un entrenamiento. Si vas a hacer algo, no lo hagas a medias.

  1. Sal de tu zona de confort

Disparar correctamente no es un movimiento naturalmente cómodo. (Aprende la técnica de tiro adecuada.) Jugar tan bajo como deberías defensivamente y ofensivamente no es cómodo. Sin embargo, a medida que te esfuerzas y mejoras en estas cosas, se harán más fáciles y mejorarás.

  1. Aporta tu propia intensidad

Los jugadores tienden a estar motivados externamente y necesitan un empujón para practicar con intensidad. No importa cuál sea el ejercicio, puedes aportar tu propia intensidad. 

Por ejemplo, puedes presionarte para conseguir más repeticiones o ejecutar mejor sin necesidad de un entrenador. Concéntrate siempre y esfuérzate al máximo, aunque el ejercicio te parezca aburrido o lento.

  1. Niégate a conformarte

Tienes que juzgar tu trabajo en función de lo que eres capaz de hacer. Si puedes terminar un Down and Back en ocho segundos, no te conformes con diez segundos, aunque ese sea el tiempo límite o sea suficiente para terminar primero.

  1. No te engañes a ti mismo

En algunos institutos los jugadores no bajan la velocidad hasta que pasan la línea de meta; y no se detienen hasta tres o cuatro metros más allá de ese punto. Cuando toques una línea antes de dar la vuelta, asegúrate de que la línea está bajo el centro de tu cuerpo. No estás trabajando para pasar el ejercicio. Estás trabajando para mejorar.

  1. Entender el coste

Cuanto mejor quieras ser, más trabajo tendrás que hacer. Mejorar tu juego no se consigue de la noche a la mañana. Se necesita la misma cantidad de trabajo para mantener el nivel que has alcanzado, pero aún más para llegar al siguiente nivel. La dedicación tiene su recompensa, pero hay que estar dispuesto a hacer sacrificios para lograr tus objetivos.